Cuáles son los tipos de soldadura y cómo se clasifican
¿Te has preguntado qué tipos de soldadura existen y cuál se debe utilizar en cada caso? Si te interesa este ámbito profesional, en este post vamos a hablarte en profundidad sobre la soldadura que, como ya sabrás, se trata de unir piezas empleando el calor y/o la compresión de ambas para obtener una única pieza. Y si quieres formarte para poder dedicarte a ello profesionalmente, desde escuela Atelier tenemos disponible el Curso en Soldadura Eléctrica, MIG, TIG con el que podrás adquirir conocimientos teóricos y prácticos requeridos en este oficio.
Índice de contenidos
Origen de la soldadura
El trabajo con el metal existe desde la época de los herreros. Con el paso de los años, hemos observado la evolución de la técnica y el surgimiento de numerosos tipos de soldadura, pero ¿sabes cuándo fue eso? Esta forma de trabajar el metal se originó en la Edad de Bronce, cuando se construían pequeñas cajas de oro mediante piezas unidas por la presión, a forma de soldadura. Aun así, no fue hasta la Edad de Hierro cuando realmente surgió la soldadura, pues hay evidencias de ello por la cantidad de herramientas encontradas. Sin embargo, esta técnica era aplicada de una forma muy rudimentaria.
No fue hasta el siglo XIX que se desarrolló la soldadura tal y como la conocemos actualmente. Aunque quisiésemos saber quién lo inventó, no se puede mencionar a una sola persona. Asimismo, si podemos destacar el nombre de August De Meritens, quien usó calor de arco para la unión de placas de plomo. Fue un estudiante suyo el que dio con una técnica de soldadura por arco eléctrico usando varillas de carbono, uno de los tipos de soldadura que destaca en la actualidad. Poco a poco, con el paso de los años, se fueron descubriendo nuevas formas de soldar, las cuales conoceremos en profundidad en el siguiente apartado.
¿Cuáles son los 5 tipos de soldadura?
La técnica para soldar más antigua es la que se consigue al aplicar el calor necesario para fundir dos metales hasta lograr que se unan. Aun así, con el tiempo fue evolucionando y aparecieron nuevas técnicas de soldadura. En los puntos siguientes, vamos a conocer los métodos que existen y sus características principales.
Soldadura por arco eléctrico
Esta es la más básica entre todos los tipos existentes. Asimismo, es la más simple de usar y dominar al completo. El proceso de esta soldadura consiste en crear un arco eléctrico entre el metal que quiere soldarse y el electrodo. A partir de este arco se sube la temperatura del metal hasta conseguir que se derrita y unir así las piezas. Su uso suele estar dirigido a la manufactura, la construcción o la reparación.
Soldadura por gas
Con la técnica de la soldadura por gas se lleva a cabo la combustión de una sustancia que se denomina acetileno. La capacidad de esta sustancia puede generar una llama que llega a una temperatura de 3.200ºC. Es un tipo de soldadura que se emplea usualmente para trabajos de mantenimiento o para la reparación de tuberías domésticas. Además, cuenta con un costo muy reducido, aunque necesita bastante tiempo para secarse.
Soldadura TIG
Una de las clases de soldadura que más se emplea para llevar a cabo trabajos delicados. Su dominio requiere de mayor experiencia para obtener resultados efectivos. Emplea gas inerte de tungsteno y aporta resultados de alta calidad que no necesitan demasiado trabajo de limpieza.
Soldadura MIG
Esta clase de soldadura por arco se ejecuta mediante un electrodo consumible y bajo un gas inerte protector de la atmósfera. El electrodo que se usa suele ser de metal y se va consumiendo poco a poco durante la soldadura. El trabajador debe llevar un mejor equipo de seguridad que el habitual, pues lleva a cabo un trabajo más complejo y con metales mayores.
Soldadura MMAW
También se conoce como soldadura metálica manual por arco. Los electrodos que usa son de acero y están recubiertos por un material que al fundirse produce una sustancia que no permite el paso del oxígeno. Al ser un método sencillo, se usa frecuentemente para actividades domésticas de bricolaje.
Algunas recomendaciones en soldadura
Al trabajar con los distintos tipos de soldadura, los soldadores se encuentran expuestos a la corriente eléctrica y a temperaturas elevadas continuamente. Así pues, en el proceso se pueden sufrir accidentes que provoquen quemaduras por contacto o salpicaduras. Y para que esto no suceda, es fundamental que la persona que se dispone a soldar cuente con un equipo de protección adecuado.
Por ello, a continuación, vamos a facilitarte algunas de las recomendaciones que debes tener en cuenta antes de soldar:
- El rostro y los ojos tienen que estar protegidos en todo momento, por lo que se usa una pantalla protectora.
- Como protección corporal se emplea ropa de manga larga, sin restos de aceite o grasas. Además, se tiene que usar un delantal de cuero, botas de protección que sean aptas para las chipas y restos del metal que se funde. Evidentemente, los guantes no pueden faltar en este proceso.
- La superficie en la que se vaya a soldar tiene que estar limpia.
- Para que el resultado sea el deseado, es necesario soldar a determinada velocidad, pues sí se hace demasiado lento es posible que el metal acabe agujereado. Sin embargo, cuando la velocidad es excesivamente rápida, el metal puede no llegar a derretirse, por lo que la soldadura será frágil y delgada.
- Al finalizar, se puede emplear un cepillo de alambre para limpiar los restos acumulados alrededor de la soldadura. Este cepillo es la mejor opción para asegurar un buen acabado.